THE BONUS BEATLE TIME!!

Mientras Paul salía de la habitación, tu preparaste tu ropa, algo cómodo y sencillo, era muy  casual y todo combinaba perfectamente con tus amados converse.



En verdad esto si existe, o bueno so se pero jajaj lo encontre en la red :3



Te metiste al baño y abriste lentamente la llave de agua caliente, mientras salía te quitaste tu pijama y te preparabas para tu ducha, al entrar viste varios artículos de limpieza personal que realmente te hicieron reír, había una botella de shampoo de The Beatles que realmente olía bien (te diste cuenta de esto al usarlo), varios jabones para el cuerpo que tenían sus caras, se veían muy divertidos, el jabón que había en la bañera era de la cara de Paul, no estaba deformado ni desgastado por el agua y el uso, se notaba que era nuevo o no llevaba mucho tiempo ahí, y otras cositas más que aunque te dieron gracia no llamaban tanto tu atención.

Te duchaste rápidamente y al terminar saliste de la regadera,  te pusiste una bata que también tenía la cara de los chicos bordada, y fuiste a verte al espejo que también era una clase de puertita (tipo el de Bob esponja) y lo que viste te dio aún más risa…

Habían cientos de artículos curiosos de uso personal, muy diferentes a los de la ducha, tenía de todo, pasta dental de los Beatles, cepillos dentales con sus cabezas en plástico, tenían un pequeño botón que al apretarlo comenzaba a sonar alguna de las canciones del álbum please please me, jabón anti-bacterial de los Beatles, hilo dental de ellos, botellitas de loción para hombre en un envase muy sofisticado y original, que según el Beatle que era tenía un olor diferente, desodorante en aerosol, barra y roll-on para hombre también con olor diferente, crema corporal, gel, laca para el cabello, talco, crema para afeitar, rastrillo, y otras cosas, y todas de ellos .

Saliste y te cambiaste rápidamente, cepillaste tu cabello y decidiste dejarlo suelto, usando como diadema un listón del mismo color que tu ropa, atado por la parte de arriba de tu cabeza dejando el moño justo arriba y dividía tu flequillo (si tienes) de la demás parte de tu cabello.

Pensabas todo tipo de cosas, ¿cómo sería tu vida al regresar a tu casa? ¿Acaso cambiaría algo en ella? Y ¿ellos se acordarían de ti después? ¿Los frecuentarías? ¿Qué pasaría contigo? Tal vez en el parque llegarían algunos paparazzi y les tomaran fotos a los 5 juntos, y se armaría revuelo por las fans; quizás eras solo un estorbo en ese momento para ellos y solo se portaban amables contigo para dejarte una buena imagen de ellos, o porque simplemente eran educados como para decirte que eras un estorbo. ¿Qué pensarían de ti? ¿Qué eras una chica odiosa, linda, divertida, insufrible, tonta…? Y luego Paul. Le confesaste tu amor, o eso creías, además invitarlo a dormir en su propia cama, habitación y casa.

-Dios, que estúpida soy, eso de invitarlo en su propia casa y habitación a dormir, y luego con migo, de seguro piensa que soy una cualquiera, que soy una naba- pensaste y luego soltaste una risita y seguiste con lo que hacías, cuando encontraste la nota que Paul había dejado y por un momento te quedaste en shock, regresaste de tus pensamientos, y muchas de las preguntas que pasaron hace unos momentos por tu cabeza tenían ya una posible repuesta. Estabas muy emocionada, que sería la sorpresa que te daría Paul. Cada minuto tu cabeza se inundaba de nuevo con nuevas preguntas y dudas, no sabías que te pasaba, era diferente a lo que habías sentido con tu ex el día que lo conociste, incluso de cuando conociste a Eder, uno de los chicos que mas habían marcado tu vida, a pesar de que terminaron y no de la mejor forma, seguían siendo amigos, muy buenos amigos, sabías que le podías contar cualquier cosa, era tu confidente cuando no tenías a Pattie cerca. Sabías que el aún sentía algo por ti, pero no quería admitirlo, era por eso que tu seguías con tu vida y el con la suya, a ninguno de los dos les molestaba que salieran con otras personas, incluso se ayudaban mutuamente a conquistar a la chica o el chico que tenían en la mira, aún estando lejos, el en Manchester y tu en cualquier parte del mundo donde te encontraras seguían siendo muy buenos amigos y mantenían la comunicación. Todo era realmente diferente a tus otras relaciones. Era obvio, estabas perdidamente enamorada de Paul.